jueves, 26 de diciembre de 2013

Esa esmeralda con toques naranjas.


Recordaba yo que en las escenas de magia siempre hay una varita, varita que se suele extraer de aquellos árboles que protegen las venas de la tierra, o lo que es lo mismo aquellos que se alimentan de la magia que atrae la vida, pero seamos sinceros el ser humano no posee magia en si mismo, aunque sin embargo canaliza perfectamente aquella del lugar en el que vive, como el árbol y sus ramas el humano que juega con la magia necesita del mismo material para optar a la sincronía, así en un estado puro y sin mácula que en gallego se dice "enxebre" invoca las palabras que transportan a un mundo mágico... y estas bien pueden ser...

Oxigastra curtisii.

La tierra tiene vida propia, en sus latidos se siente la magia y cuando el agua resurge con fuerza, se torna vida y ese encantamiento se extiende por todas partes... las hadas y los dragones solo aparecen en sitios mágicos y cuando esta energía desaparece, ellos también, es cierto que son los primeros... pero de los muchos dragones que pueblan la tierra, aquellos que solo podían vivir donde la madre tierra carga sus pilas han ido desapareciendo, se han muerto o en el mejor de los casos se han marchado, ya no existen donde la magia desaparece... pero mira tu, que aquí donde nacen las nubes, el arte de la vida se torna en dos muestras de orgullo, existen dos dragones de los que hablan las leyendas, aquellos que portan ese don en sus alas, y hoy hablaremos de uno de ellos.

Nuestra esperanza esmeralda, a la que también podemos llamar oxigastra, resurge a su vida aérea como todos los dragones, después de vivir en el agua, pero no en un agua cualquiera. Nuestra protagonista necesita vivir en corrientes de agua batida y con zonas limpias donde resguardarse cuando el caudal baja, si el continuo discurrir del agua esta protegido por una masa forestal que tamice la luz el enclave es perfecto.


Su existencia y la contaminación son antagónicas, así observemos alguna muestra de contaminación, sabremos a ciencia cierta que ella ahí no vive.

¿Porqué?.

Existe una razón científica para ello, esta pequeña esmeralda de mal genio y volar perfecto no ha evolucionado desde tiempos en que los dinosaurios poblaban la tierra, para qué... si ya es perfecta.... pero esa particularidad ha traído consigo una desventaja, ese parón evolutivo no la hace resistente a la contaminación de las aguas... y como las libélulas son seres de agua, cuando su medio está contaminado se muere.

También podemos decir que cuando el ser humano (por ejemplo), mata la magia, los seres mágicos desaparecen.

Cuando nuestra protagonista adopta la forma que producen los sueños, un escalofrío suele recorrer el cuerpo de aquellos que aman a estos pequeños dragones, una leyenda no se ve todos los días.

Así estos dragones en su forma juvenil presentan los ojos rosados y las alas tintadas.

Como esta bella damisela que aquí veis.


¿Os ha hecho gracia su pose colgada?... pues lo explico. Como hace millones de años, nuestras amigas siguen con sus mismas costumbres al volar bajo la vegetación de ribera, en un rápido giro vertical descansarán en las ramas sobre el cauce, para ello se cuelgan... el resto del tiempo se lo pasarán volando.



¿Y como es el chico?.. Pues el chico, es igual que la chica, si bien su abdomen es más estrecho en su longitud teniendo en su extremo como un abultamiento.


Es fascinante ver como remontan un cauce, vuelan como en un colchón de aire a dos palmos del agua, y cuando de repente se encuentran con un salto de agua en vertical lo remontan sin separarse de éste, apareciendo en la parte superior como si aquí no hubiese pasado nada y continuando su camino.

Difícil es verlos parados, y seguirlos es tener que pensar en distancias muy largas.


Cuando nuestros amigos comienzan su juventud aérea, no piensan precisamente en quedarse sobre el lecho del río fascinando aficionados, tienen miras más altas, por lo tanto si los quieres ver tendrá que levantar la vista y... en aquella montaña, allá a lo lejos, arriba en la cumbre si la alcanzas, verás a las jóvenes oxigastras discutir y perseguirse entre ellas, ganando confianza y buenas artes con las que en su madurez llenarán de magia el cauce que honren con su presencia.

Una vez han alcanzado la madurez, sus formas y costumbres no cambian, si bien su carácter es tremendamente arisco,... el luchar por novia siempre es conflictivo.


Otro dato curioso son esos ojazos verdes llenos de magia, y naturalmente las alas que han ido ganando transparencia, No se necesita color con una personalidad tan desbordante.

Alcanzando esta etapa veremos deambular a nuestra amiga por los cauces fluviales... pero... solo aquellos que lo merecen.


Así que cuando allí donde viváis, os cruzáis con una oxigastra algún día , sabréis que en vuestro hogar también existe la magia, y podéis estar orgullosos, porque los seres humanos que han estado antes que vosotros, han dejado un bello legado...

Si vosotros cuidáis ese legado, la magia seguirá su curso, y vuestros hijos y los suyos también la podrán disfrutar


Un saludo desde donde nacen las nubes...

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